¿Tu coche está perdiendo potencia? Esto es lo que debes revisar

¿Notas que tu coche ya no tira como antes? ¿Te cuesta adelantar, subir o simplemente sientes que le falta “chicha”? Si es así, es probable que esté perdiendo potencia y necesites echarle un vistazo. Tranquilo, no siempre es una avería grave, pero sí conviene revisar ciertos puntos antes de que el problema vaya a más.

¿Por qué mi coche pierde potencia? Causas más frecuentes

Vamos al grano. Estas son algunas de las razones más comunes por las que tu coche puede estar perdiendo potencia.

Filtro de aire sucio

El filtro de aire es como los pulmones del coche. Si está sucio o taponado, el motor no recibe suficiente aire para la combustión, y eso se traduce en pérdida de fuerza, sobre todo al acelerar. Además el motor intenta compensar la falta de aire quemando más combustible y aumentará el consumo. La buena noticia es que la solución es sencilla y poco costosa. Con cambiar el filtro, puedes notar una mejora inmediata. La recomendación es cambiarlo generalmente cada 15.000 Kilómetros o una vez al año, pero dependerá de varios factores como tipo de coche, la conducción, etc. Compra un filtro de aire de calidad.

Problemas con el turbo

Si tu coche tiene turbo, cualquier fallo en esta pieza hará que el motor no rinda como debe. Puede tener desde una fuga en las tuberías hasta un fallo del propio turbocompresor. Sabrás que hay un problema si notas una pérdida de potencia repentina, silbidos extraños o humo negro al acelerar. 

¿Qué puede hacer que el turbo no funcione bien?

La falta de aceite o la mala calidad del aceite pueden causar daños severos en el turbo. Las partículas contaminantes en el aceite también pueden dañar los componentes internos y las obstrucciones o fugas en las mangueras o el sistema de admisión también pueden afectar al rendimiento.   

Inyectores sucios o defectuosos

Los inyectores son los encargados de introducir el combustible en el motor. Si están sucios o dañados, la mezcla de aire y combustible no será la correcta, y eso se nota en el rendimiento. En coches diésel esto es especialmente frecuente. Las causas de la suciedad o avería de los inyectores pueden deberse a varios factores. Una de las más comunes es la acumulación de suciedad, ya que el combustible puede contener pequeñas partículas que obstruyen el sistema de inyección. El desgaste también juega un papel importante, con el paso del tiempo los inyectores pierden eficiencia. Las fugas son otro problema frecuente, provocadas generalmente por daños  en los componentes internos del inyector. Por último, la calidad del combustible influye directamente en su buen funcionamiento, un combustible de baja calidad suele contener más impurezas que aceleran la obstrucción del sistema.

Filtro de combustible obstruido

¿Has notado tirones o que el coche falla al pisar el acelerador? El filtro de combustible podría estar obstruido, y eso impide que el combustible llegue correctamente al motor. Suele pasar con el tiempo o si usas un combustible de baja calidad. Los síntomas más comunes de un filtro de combustible obstruido pueden manifestarse de diferentes formas. Uno de los más evidentes es la dificultad para arrancar el motor, al no llegar suficiente combustible, esto se vuelve complicado. También puede notarse una pérdida de potencia, especialmente al acelerar o al intentar mantener una velocidad constante, lo que da la sensación de un motor débil. Otro indicio es el aumento del consumo de combustible, ya que el motor trabaja con mayor esfuerzo para generar la misma potencia. En casos más graves, el motor puede llegar a pararse de forma repentina. Además, es posible que se escuchen ruidos extraños provenientes del motor, sobre todo al acelerar, lo que puede indicar un funcionamiento irregular debido a la falta de flujo adecuado de combustible. Por suerte, cambiarlo también es relativamente económico.

Válvula EGR atascada

La válvula EGR (Recirculación de Gases de Escape) es clave para reducir las emisiones contaminantes, pero cuando falla puede afectar seriamente el rendimiento del motor. Tiende a acumular carbonilla con el tiempo, sobre todo si haces muchos trayectos cortos o conduces en ciudad. Una válvula EGR sucia o bloqueada puede provocar pérdida de potencia y tirones. Si necesitas cambiarla visita nuestra tienda online.

Síntomas comunes de una válvula EGR defectuosa

• Pérdida de potencia al acelerar.
• Aumento del consumo de combustible.
• Humo negro en el escape.
• Ralentí inestable (motor que vibra o se apaga en parado).
• Dificultades al arrancar el vehículo.

Problemas con el caudalímetro

Este sensor mide la cantidad de aire que entra al motor y ajusta la mezcla de aire-combustible. Si falla o está sucio, la mezcla no será la adecuada, y eso repercute directamente en la potencia del coche. A veces, basta con limpiarlo, pero en otras ocasiones lo mejor es cambiarlo. Nunca limpies el caudalímetro con aire a presión ni productos agresivos. Si está muy sucio o dañado, lo mejor es sustituirlo. Aquí encontrarás el caudalímetro para tu coche al mejor precio.

¿Qué puedo hacer si noto que mi coche no tiene fuerza?

Si ya has notado que tu coche ha perdido potencia, hay algunas observaciones que puedes hacer antes de llevarlo al taller.

¡Aquí van algunos consejos prácticos!

Escucha y observa

Presta atención a ruidos raros, luces encendidas en el cuadro, consumo excesivo o humo por el escape. Todos estos síntomas te pueden dar pistas sobre qué está fallando.

Humo negro: mezcla rica (problemas con inyectores, EGR o turbo).

Humo blanco: posible fallo de junta de culata o entrada de refrigerante.

Humo azul: quema de aceite (podría ser grave).

Revisa lo básico 

Antes de pensar en una reparación cara, revisa las piezas más simples:

• Filtro de aire
• Filtro de combustible
• Sensor de caudal de aire
• Conectores sueltos o cables deteriorados

Muchas veces, una simple limpieza o sustitución puede arreglar el problema sin necesidad de una visita al taller.

Si el coche está fallando, no lo fuerces. Conducirlo así podría empeorar el problema o hacer que una avería leve se convierta en algo serio. Intenta llevarlo al taller cuanto antes.

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