Los 4 motivos principales por los que te puedes quedar tirado con el coche en verano

El verano es una época del año en la que muchos de nosotros aprovechamos para salir de vacaciones y disfrutar del buen tiempo y de un merecido descanso. Sin embargo, el calor, los kilómetros y las largas distancias pueden poner a prueba nuestro vehículo, así que, es importante estar preparados para evitar quedarnos tirados en la carretera. Hoy hablaremos de los cuatro motivos principales por los que te puedes quedar tirado con el coche en verano y cómo prevenirlos.

En muchas ocasiones la falta de un mantenimiento adecuado es una de las principales causas de quedarte tirado con el coche. A veces olvidamos la importancia que tienen las revisiones y los cambios de aceite, filtros y demás componentes esenciales para el buen funcionamiento del vehículo. Y esto, puede resultar en averías inesperadas en pleno viaje, dejándote tirado en medio de la carretera.

El sobrecalentamiento del motor es uno de los problemas más comunes a los que los conductores se enfrentan en verano. Las altas temperaturas exteriores y el esfuerzo adicional de los viajes largos pueden llevar a que el motor de tu coche se sobrecaliente. 

Algunas causas del sobrecalentamiento del motor

• Niveles bajos de líquido refrigerante: si el nivel de refrigerante es bajo, el motor no puede mantenerse a una temperatura adecuada.
• Fugas en el sistema de refrigeración: las fugas pueden provocar una pérdida de refrigerante y por lo tanto llevará al sobrecalentamiento del motor.
• Termostato defectuoso: un termostato que no funciona correctamente puede impedir que el refrigerante circule de forma correcta.
• Radiador obstruido: la suciedad y los residuos pueden obstruir el radiador y reducir su eficiencia.

Cómo prevenir el sobrecalentamiento del motor

Si quieres evitar que el motor de tu coche se sobrecaliente, sigue estos consejos:

• Revisa los niveles de refrigerante regularmente y rellénalos según sea necesario.
• Inspecciona el sistema de refrigeración en busca de fugas y repáralas de inmediato.
• Cambia el termostato si sospechas que está fallando.
• Asegúrarte de que el radiador funciona perfectamente y está libre de obstrucciones.

Otro de los problemas más habituales son los neumáticos. Con el calor sufren alteraciones y esto hace que aumente el riesgo de reventón. Una presión incorrecta puede causar un desgaste irregular además de aumentar el riesgo de accidente. La alta temperatura del asfalto hace que la banda de rodadura se caliente, provocando un mayor desgaste y haciendo que se produzcan daños. Recuerda que, la presión adecuada en los neumáticos de un coche es fundamental para la seguridad y el rendimiento del vehículo. 

Si quieres mantener los neumaticos en buen estado revisa la presión regularmente y ajústala según las recomendaciones del fabricante. Busca signos de desgaste y reempláza los neumaticos si es necesario. También es importante no sobrecargar el vehículo, ya que el peso adicional puede aumentar la presión sobre los neumáticos.

Aunque es más habitual que la batería del coche falle en invierno, el calor extremo también la afecta y puede causar problemas. Las altas temperaturas pueden evaporar el líquido, reduciendo su capacidad y vida útil. Además, el uso frecuente del aire acondicionado, el sistema de entretenimiento, y otros dispositivos eléctricos, pone una carga adicional sobre ella haciendo que se agotade mucho más rápido de lo esperado. Si es posible, estaciona tu coche siempre a la sombra o en un garaje para proteger la batería del calor extremo. Los garajes o lugares con sombras pueden ayudar a mantener una temperatura más baja en el coche, reduciendo el riesgo de daños. Además, usar un parasol en el parabrisas también te ayudá a reducir la temperatura interna del vehículo. Considera reemplazar la batería si tiene más de tres años o muestra signos de debilidad.

Recuerda que la prevención es clave para evitar contratiempos y disfrutar de un viaje seguro.

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